¿Porqué no intentas ser felíz sin él?
+No me da el corazón.
-Sí que te da.
+Que no. Cállate.
-No quiero verte así.
+Pues no me veas.
-Imbécil. Olvidale. ¿No te das cuenta? Cada día que pasa le quieres más, y como sigues como una niña imaginándole, tu corazón se abre un poquito más. Llegará el momento en el que no podrá abrirse más, y no alla vuelta atrás.
+¿Y qué quieres? No puedo controlarme. No puedo borrar su foto de mi iPod, no puedo para de seguir leyendo sus te quiero. De mirar aquellas fotos. Y aquellas bonitas frases que me dedicabas. Todavía me acuerdo de aquel primer día que le conocí. Recuerdo cada mes, que le quería aún más y más. Todavía me despierto por la mañana y le recuerdo.
-Él ya no está contigo. Está con ella.
+Sigue ahí. Solo tengo que luchar por lo que quiero.
-Haz lo que te de la gana. Pero estoy harta de consolarte cuando me vienes llorando y relantándole. Te mereces algo mejor.
+Me merezco a él, y punto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario